Presión Social y Nueva Dinámica Familiar

San José, 15 de mayo (Elmundo.cr) – La tendencia conocida como ‘libre de niños’, que alude a la decisión consciente y voluntaria de optar por no tener hijos, está experimentando un notable crecimiento en Costa Rica. Esta información se basa en los datos recopilados en la reciente grabación de la Universidad de Costa Rica (UCR) de 2024, que muestra cómo esta elección se está volviendo más común entre las parejas costarricenses.

Vinicio Jiménez, quien es representante de la Facultad de Profesionales en Orientación y ha realizado un exhaustivo estudio cualitativo sobre el tema, explica que «el análisis de la evolución de la dinámica familiar se fundamenta históricamente en el modelo de familia central tradicional». Este modelo, que ha prevalecido por décadas, se ha visto cuestionado por la aparición de nuevas formas de entender y estructurar las relaciones familiares.

El estudio de Jiménez revela que las parejas que deciden vivir sin hijos, aunque proceden de diferentes contextos y situaciones, presentan un fuerte vínculo emocional entre ellos. Investigaciones anteriores han indicado que estas parejas suelen reportar una mayor satisfacción en su matrimonio en comparación con aquellas que sí tienen hijos. «Las prioridades, los valores y las expectativas de vida que poseen estas parejas son marcadamente diferentes de los recogidos en el modelo familiar tradicional», señala Jiménez. Las prioridades de estas parejas se centran principalmente en pasar tiempo juntos, emprender estudios, desarrollar proyectos de manera conjunta, viajar y brindarse el apoyo mutuo que las parejas necesitan para crecer y prosperar.

La grabación de la UCR pone de manifiesto que diversos factores, como la inestabilidad económica actual, la situación social del país y del mundo, las decisiones personales de cada individuo, así como el estilo de vida que se desea llevar, contribuyen a esta elección. Además, las experiencias negativas en torno a la crianza de hijos también juegan un papel crucial en la decisión de vivir sin ellos. Sin embargo, es importante mencionar que las parejas que eligen no tener hijos a menudo enfrentan presiones sociales y estigmas que provienen de sus entornos laboral, social y familiar.

Jiménez observa que las personas que optan por no tener hijos frecuentemente se enfrentan a comentarios despectivos como «nunca conocerás el amor verdadero», lo que puede llevar a una reducción en su círculo social. Esta problemática tiende a agravarse especialmente cuando amigos y familiares ya han formado sus propias familias y tienen hijos, lo que a menudo complica la socialización y el mantenimiento de relaciones cercanas.

La investigación también destaca que para las mujeres, esta decisión representa un rechazo a los roles tradicionales que se asocian con la maternidad, mientras que para los hombres, comunicar esta falta de deseo de paternidad a sus familias—sobre todo a sus madres—puede ser un verdadero desafío, a menudo percibiéndolo como un «secreto familiar».

El personal de orientación subraya la relevancia de construir una sólida red de apoyo que respete y comprenda la decisión de no tener hijos, lo que resulta crucial para brindar ese apoyo emocional que estas parejas requieren. Jiménez concluye que es fundamental llevar a cabo una planificación adecuada del proyecto de vida, siempre tomando en cuenta una madurez emocional considerable para evitar tensiones en el futuro.

En el contexto del Día Internacional de la Familia, la Facultad de Profesionales en Orientación enfatiza la importancia de entender y respetar las diversas configuraciones familiares que conviven en el país, promoviendo una sociedad más inclusiva y comprensiva.