La mujer proporcionó información bancaria de 14,000 personas al grupo de estafadores.

La Agencia de Investigación Judicial (OIJ) anunció el arresto de una mujer sospechosa que presuntamente ha proporcionado la información bancaria de 14 mil personas a una organización dedicada a estafas. Este evento tuvo lugar el jueves, marcando un importante avance en las investigaciones sobre delitos cibernéticos en la región.

La mujer, de 30 años de edad, se encuentra vinculada a una organización criminal que fue desarticulada en noviembre de 2024. Esta conexión ha despertado el interés de las autoridades, ya que indica una red de actividades ilegales bien estructurada.

A través de exhaustivos procedimientos de investigación, se llegó a la conclusión de que, aparentemente, la sospechosa se benefició al haber trabajado para varias empresas que ofrecían servicios a un banco estatal. Se estableció que entre octubre de 2022 y enero de 2024, desempeñó un papel activo que le permitió acceder a datos confidenciales y realizar operaciones junto con el grupo criminal. Este aspecto del caso es crucial, ya que su acceso a la información bancaria era una parte determinante en la operación de fraude.

Según las declaraciones de las autoridades, se cree que la mujer stole información de alrededor de 14 mil usuarios bancarios y la facilitó a la organización, lo que probablemente fue de gran utilidad para llevar a cabo y completar numerosos fraudes informáticos. Esta acción no solo afecta a las víctimas directas, sino que también socava la confianza en el sistema bancario y genera un impacto negativo en la población general.

Asimismo, resulta alarmante que, aparentemente, gracias a los datos obtenidos por la mujer, la organización fue capaz de contactar telefónicamente a los verdaderos titulares de las cuentas activas, engañándolos para que entregaran información adicional o realizaran acciones perjudiciales para su seguridad financiera. Esto añade una capa adicional de complejidad al caso, ya que refleja métodos cada vez más sofisticados que utilizan los delincuentes.

Es importante resaltar que la organización a la que pertenece la sospechosa había sido desarticulada tras siete ataques metódicos. Estos ataques reflejaron un nivel de planificación y ejecución que generó graves repercusiones en el sistema financiero. La magnitud de estas estafas ha llevado a la oficina del fiscal a tomar medidas drásticas.

Posteriormente a los eventos citados, la fiscalía ordenó la detención de 23 personas que, según las investigaciones, han estado involucradas en el robo de una suma considerable de 125 millones de colones, dirigidos a seis clientes bancarios específicos. Este tipo de acciones es lo que fomentará un enfoque más riguroso en las normativas de seguridad y protección de datos dentro del sector financiero.

Por lo tanto, el caso correspondiente a la sospechosa con el apellido mencionado se está investigando dentro del marco del caso 21-002236-0060-PE. Este caso representa no solo un claro avance en la lucha contra el fraude cibernético, sino también una advertencia para todos los usuarios de servicios financieros sobre la importancia de proteger su información personal.