Un hombre de 39 años, conocido con los apellidos Cantillo Calvo, ha sido objeto de investigación tras las sospechas de que intentaba controlar y retener de manera coercitiva a una mujer que responde al nombre de Marín Martínez. Este caso ha ido ganando atención mediática y legal, lo que ha llevado a la aplicación de medidas cautelares que se han establecido por un periodo de seis meses.
La revelación de los detalles fue realizada por el Ministerio Público, quien actuó en respuesta a una solicitud presentada por la Oficina del Fiscal General Adjunto. Esta solicitud fue valorada positivamente por el juez que está llevando el caso, lo que indica la gravedad de las acusaciones y la urgencia de tomar medidas cautelares por la seguridad de la mujer involucrada.
El ciudadano Cantillo se encuentra bajo investigación por presuntos delitos que incluyen abuso físico, violaciones de la dignidad y, más disturbador aún, la transgresión de una medida de protección que fue implementada para salvaguardar a la víctima. Estas medidas son cruciales en situaciones donde la integridad y la seguridad de una persona están en riesgo debido a comportamientos de abuso por parte de un individuo cercano.
La resolución judicial que impuso la medida de precaución fue emitida el 20 de abril y proviene del tribunal extraordinario del II Circuito Judicial de San José. Este tipo de tribunal suele abordar casos de alta relevancia y urgencia, subrayando la seriedad de las acusaciones contra Cantillo.
En el contexto de la investigación, el Ministerio Público ha solicitado una evaluación completa a la víctima. Esta evaluación se realizará a través del Departamento Médico Legal de la Agencia de Investigaciones Judiciales, y los resultados serán determinantes. Dependiendo de lo que se descubra en esta evaluación, se podrían agregar otros delitos a los ya mencionados o incluso modificar las condiciones del régimen existente, lo que podría afectar directamente al acusado.
La atención sobre el caso se intensificó cuando la semana pasada se difundió un video donde quedaba claro que un hombre había agredido a la mujer en un bar, lo que llevó a su familia a reportarlo como desaparecida ante las autoridades. Posteriormente, a través de investigaciones exhaustivas, la mujer fue localizada en un motel junto al sospechoso, un hallazgo que confirma las peores sospechas sobre la naturaleza de su relación.
El hombre fue detenido como parte de una operación que se llevó a cabo en respuesta a la multitud de indicios y declaraciones recopiladas durante la investigación. En un sondeo realizado a través de redes sociales, el detenido no solo admitió que Marín es su pareja, sino que también confesó haberla agredido en múltiples ocasiones, pese a insistir en que continúan juntos en esta complicada relación.
Es relevante mencionar que la víctima es madre de tres niños, de los cuales none son hijos del presunto agresor, lo que recalca la complejidad de la situación en la que ella se encuentra. El caso está siendo procesado bajo el número de archivo 25-011740-0042-PE, y es motivo de gran preocupación social, puesto que resalta problemáticas alarmantes sobre la violencia de género y la protección de víctimas en situaciones de riesgo.