Las alternativas que surgieron de todas las violaciones legislativas resultaron en la ruptura del quórum a las 16:20, lo que les permitió a los legisladores abandonar sus compromisos y disfrutar de unas merecidas vacaciones de Pascua. Este tiempo libre ha llegado en un momento crucial, ya que el viernes es una fecha significativa en la que se recuerda la Batalla de Rivas y se honra al héroe nacional Juan Santamaría. Así, los legisladores cerraron sus actividades del día, concluyendo su trabajo legislativo en un ambiente que, aunque tenso, resultó en importantes decisiones tomadas.
Es interesante señalar que, en el momento del quórum roto, las ausencias eran evidentes en todos los bloques, a excepción del grupo de la legislación independiente, cuyos miembros estuvieron presentes en la sesión legislativa. La situación en el Parlamento se tornando crítica, ya que sólo contaban con tres personas legislando, una cifra que no alcanza el mínimo requerido para continuar con las discusiones y aprobaciones de leyes.
Con la interrupción de las sesiones, los legisladores ahora pueden disfrutar de días de descanso, regresando a su actividad el lunes 21 de abril. Al volver, enfrentarán un periodo intenso y decisivo, marcado no solo por el cierre de la ventana parlamentaria habitual, sino también por la proximidad de las elecciones que se llevarán a cabo el 1 de mayo. Este tiempo de inactividad representa una oportunidad para reflexionar sobre el trabajo legislativo realizado y prepararse para el sprint final que caracteriza a estos momentos de cierre.
Durante la jornada del jueves, los legisladores sostuvieron dos reuniones en el Parlamento. En la mañana, su enfoque estuvo en analizar facturas que habían experimentado movimientos repetitivos, con la intención de avanzar gradualmente. Sin embargo, a pesar de sus esfuerzos, solo se logró alcanzar la primera discusión respecto a varios asuntos. En total, se registraron 23,562 iniciativas relacionadas con «leyes imponibles y de eficiencia y sus mejoras», orientadas a garantizar la asignación de fondos para proyectos de infraestructura como puentes en rutas tanto nacionales como cantónicas, además de la rehabilitación de edificios y el mantenimiento regular de los mismos.
Alternativos presentes y ausentes cuando cierran las puertas. (Captura de pantalla)
Ninguno
Por la tarde, los legisladores contaban con una extensa lista de iniciativas pendientes, incluyendo nueve proyectos en otra discusión y reformas a la ley electoral que se encontrarían en su primer debate. A pesar de la relevancia de estos temas, la vigilancia política prevaleció y solo se sometieron a votación dos proyectos: uno sobre financiación de proyectos rurales, impulsado por un esfuerzo conjunto entre el sector público y privado, y otro que busca la restauración de los derechos de los residentes más vulnerables de Costa Rica.
Se abordó también un proyecto que contempla facilitar el retiro de fondos del ROPC a personas que padecen enfermedades severas. Sin embargo, antes de llegar a una decisión, la situación se complicó y se interrumpió la discusión. Durante los primeros diez días del mes, el Congreso logró aprobar un total de 12 iniciativas, superando así la cantidad de leyes aprobadas en todo el mes de marzo.
Entre estas iniciativas destacadas se encuentran leyes dirigidas a castigar la contratación de menores en situaciones de explotación y otras que buscan aumentar las penas de prisión relacionadas con casos penales. De cara a su retorno, el cuerpo legislativo se enfocará en maximizar su productividad, considerando que solo dispondrán de siete sesiones parlamentarias antes de que llegue mayo. Este mes será crucial, ya que se prevé la elección de la nueva Junta Legislativa el 1 de mayo, y en los días siguientes, el presidente Rodrigo Chaves tomará la palabra en reuniones especiales que definirán la agenda legislativa para el futuro cercano.