El voto evangélico para las próximas elecciones aún se está debatiendo y el domingo Nueva República buscó un acercamiento con los líderes de la iglesia, insistiendo en que son el grupo más cercano a ellos.
«Algunas personas sólo hablan de principios durante la campaña electoral, nosotros siempre los hemos vivido y defendido, no sólo cuando comienza la política. Agradezco profundamente a todos los sacerdotes que han reiterado su apoyo a la Nueva República, tienen claro que nunca hemos sido tibios», dijo el candidato Fabricio Alvarado tras el encuentro.
Líderes y pastores estuvieron en la reunión. Antes que ellos, Nueva República afirmó ser «el único partido verdaderamente conservador del país. Comprometido con la defensa inquebrantable de los principios y valores que definen a Costa Rica», dijo.
Según Alvarado, sus hábitos cotidianos son más evidencia que otros documentos firmados por otros candidatos.
“En este encuentro no firmamos ningún papel para aparentar, hemos demostrado con acciones que la defensa de nuestros principios y valores no se negocia. Este es un compromiso con Dios, nuestras familias y Costa Rica”, concluyó Alvarado.
El chavismo también coquetea con el voto evangélico
El debate sobre el voto religioso se prolonga desde hace varias semanas, sobre todo después de otros acercamientos de Pueblo Soberano y varias iglesias.
Una parte de las iglesias evangélicas participaron en la votación en Althingi. A finales de octubre siguieron actividades conjuntas.
Allí, un grupo conservador de cristianos evangélicos reafirmó su apoyo a la candidata chavista, Laura Fernández.
«Nuestros valores no se tocan. Son parte de nuestra identidad, los valores no son negociados ni políticos. La señora Laura Fernández lo tiene muy claro, nos ilusiona la continuidad en la defensa de nuestros principios y el respeto a la fe», afirmó Reinaldo Salazar, fundador del grupo.
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Durante el acto también se presentó el plan de gobierno de Fernández y hubo tiempo para orar por los candidatos presentes, ya que también estuvieron presentes los candidatos a la vicepresidencia, Francisco Gamboa y Douglas Soto, así como los candidatos a la vicepresidencia.
La candidata chavista prometió proteger los valores relacionados con la familia, la vida y la religión, si llega a ser presidenta de la república.
A partir de ese momento, la Nueva República respondió tildándose como una alternativa más conservadora para las elecciones.
