Un hombre llamado Pérez Mena y que era el esposo de Kimberly Araya, quien fue asesinado en abril de 2024, fue sentenciado a 35 años, ocho meses y diez días de prisión por matar a su cónyuge.
La sentencia se emitió después de que el acusado se sometió a un procedimiento acortado especial, con el que evitó ser juzgado.
Pérez aceptó los cargos presentados contra él y reconoció que era responsable de los crímenes del codificador de mujeres, amenazas contra una mujer, limitación a la autodeterminación y la simulación del crimen, todo en detrimento de Araya.
Según la evidencia, el hombre ejerció un comportamiento abusivo en detrimento de su esposa y también repitió las amenazas.
El 18 de abril de ese año, el acusado puso fin a la vida de Araya y trasladó su cuerpo en un automóvil al sector de Zurquí, donde lo arrojó a una pendiente del lugar.
Pérez también aceptó que, después de cometer femicidio, expuso la desaparición de la mujer ante la Agencia de Investigación Judicial (OIJ).