El gobierno de Costa Rica recibió la aprobación de una línea de crédito enrutable y no comprometió hasta $ 500 millones por el Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF).
Con esta herramienta, el país puede tener acceso a la liquidez para enfrentar interrupciones en los mercados financieros o emergencias a eventos climáticos extremos.
«Esta línea no representa una deuda inmediata, sino un apoyo estratégico para proteger el progreso que hemos logrado en la sostenibilidad fiscal. Es como tener un paracaídas muy preparado: no esperamos usarlo, sino para que piense y fortalezca nuestra posición antes de cualquier futuro», dijo el ministro de finanzas, Acosta.
Este es el primer CAF financiero que CAF ha dado al país, ya que es un miembro completo de la organización.
La jerarquía agregó que la facilidad financiera permitirá al país enfrentar posibles episodios de volatilidad interna o externa, sin comprometer sus indicadores fiscales.
Además, es la segunda línea de crédito que el país recibe en 2025. A principios de julio, el Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó una línea de crédito flexible (LCF) por un período de dos años por $ 1.5 mil millones al Banco Central de Costa Rica.