Él Candidato presidencial del Partido Nacional de Liberación (PLN), Álvaro Ramos, Estaba claro que su movimiento no tenía nada que ver con el ex alcalde de San José Johnny Araya, pero también que las figuras del liderazgo del partido no tenían interferencia en sus decisiones.
Ramos explicó que es necesario aclarar la separación de dos cosas: «Una cosa es el partido abierto y democrático, y otro es mi campaña, mi movimiento que tiene la base de la liberación nacional».
Esto es después de que el Grupo Extra anunció que Araya tiene la intención de servir a la reunión cantoniana de San José.
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«Quiero dejar en claro que Johnny Arya no es parte de mi movimiento; nunca ha sido, no fue desde el principio, no lo hará, no será parte de mi gobierno, no hará un diputado», enfatizó.
Reconoció que la base de liberación no es suficiente para ganar las elecciones, por lo que dijo que estaban abiertos a agregar personas fuera del partido.
«Pero la liberación nacional no es suficiente, estamos buscando a todos los costarricenses que quieran construir una mejor Costa Rica para unirse a este movimiento», dijo.
Ramos explicó que aunque el propio Araya dijo que no quería ser diputado, en el último caso que decidió lanzar su nombre, hay todos los procesos dentro de la fiesta que involucra muchos pasos y que podría articular para que la reunión del partido no lo elija dentro de los candidatos.
«No es solo que no lo apoyo, es que este liderazgo el que lo apoya se interpretará que no apoya mi candidatura», dijo Ramos.
El candidato de Verdiblanco ha confirmado que el PLN permanece en un proceso de renovación y liderazgo, como ‘Figuerismo’, ‘arism’ o la figura de Antonio Álvarez DeSanti, ya ha dicho públicamente que se han reservado y que hoy no es aceptable ‘que quieran reanudar.
«Ninguna decisión mía es gripe para esa cúpula, soy alguien nuevo, alguien más que conduce a un nuevo camino», agregó.
Ramos insistió en que su movimiento se basa en ideas y soluciones, donde la democracia puede responder a los problemas de las personas.
