Este sábado 10 de mayo, el cantón de Turrialba se convirtió en un escenario vibrante de naturaleza y una palpable pasión por los pájaros gracias a la celebración del gran día global. Esta actividad única y envolvente, que convoca a miles de personas alrededor del planeta para observar diversas especies de aves y documentar sus avistamientos, resuena como una verdadera fiesta de biodiversidad.
Desde las primeras horas del día, los grupos de entusiastas de Turrialba se unieron a esta noble iniciativa. En distintos puntos del cantón, capturaron con sus cámaras la vasta variedad de pájaros que habitan esta rica área ecológica.
Esta experiencia enriquecedora no solo convocó a la comunidad local, sino también a visitantes que reconocen a Turrialba como uno de los destinos más importantes del país para la observación de aves, contribuyendo así a una mayor conciencia ambiental y aprecio por la avifauna.
Turrialba ha participado en esta iniciativa global desde 2017 y realiza el evento en dos ocasiones al año: en mayo y octubre, meses clave que coinciden con las temporadas de migración de aves entre América del Norte y América del Sur.
En esta edición, el municipio de Turrialba brindó un sólido apoyo logístico y de transporte a organizadores y participantes, recorriendo el cantón y fortaleciendo su imagen como una región comprometida con la conservación y el ecoturismo.
‘Este año el municipio de Turrialba ha colaborado de varias maneras, proporcionando logística para la actividad y apoyando a los organizadores y participantes. Además, se ha promovido el turismo y la hospitalidad del cantón para que quienes participan en esta iniciativa se sientan bienvenidos en nuestra comunidad‘, comenta Carlos Hidalgo Flores, alcalde de Turrialba.
En el país se registran 936 especies de aves, de las cuales en Turrialba se pueden observar 631, lo que representa un asombroso 67.41% del total avistado a nivel nacional.
Entre los lugares más visitados este sábado estuvieron el Monumento Arqueológico Guayabo, CATIE, el Lago Angostura, Aquiras y la Finca Tres Equis, cada uno ofreciendo una experiencia única de avistamiento.
Durante este evento, las horas más propicias para la observación se dieron al amanecer y al atardecer, momentos en los que el canto y el vuelo de los pájaros transformaron a Turrialba en un verdadero paraíso para los amantes de la ornitología.
