Un hombre de 39 años, identificado como De Arias y de nacionalidad ecuatoriano, fue asesinado a tiros en un trágico incidente ocurrido en la comunidad de El Roble, situada en Puntarenas. Este lamentable suceso tuvo lugar el jueves por la noche, generando conmoción entre los habitantes de la zona.
Según el informe preliminar proporcionado por las autoridades locales, el incidente se desarrolló alrededor de las 9 p.m.. En ese momento, se encontraba El tema estacionado en una carretera pública dentro de su vehículo, aparentemente sin estar involucrado en ninguna actividad sospechosa. Sin embargo, esta paz se vio interrumpida de manera abrupta cuando varias personas se acercaron al automóvil con intenciones claramente hostiles.
Lo que siguió fue un ataque violento; según testigos, las mismas personas abrieron fuego en múltiples ocasiones, impactando a De Arias en diversas partes de su cuerpo, incluyendo la cara, el pecho y una de sus extremidades. La brutalidad de este ataque ha dejado a la comunidad en estado de shock, y muchos se preguntan sobre los motivos detrás de tal agresión.
Desafortunadamente, el resultado de este ataque fue fatal, y el hombre murió en la escena. Tras el trágico incidente, su cuerpo fue trasladado a la morgue judicial para realizar la autopsia correspondiente, lo que permitirá determinar las causas exactas de su muerte y proporcionar toda la información necesaria para el avance de la investigación.
Los sospechosos de este acto violento lograron escapar del lugar del crimen y actualmente se encuentra en paradero desconocido. Las autoridades están realizando un esfuerzo conjunto para localizarlos y hacer justicia por el asesinato de De Arias. Este caso no solo pone de relieve la violencia que se vive en ciertas comunidades, sino que también plantea serias preguntas sobre la seguridad pública y la efectividad de las medidas de protección ciudadana.
En respuesta a este incidente, las autoridades judiciales han abierto una investigación exhaustiva para esclarecer las circunstancias del homicidio. Están recopilando testimonios de testigos, revisando grabaciones de cámaras de seguridad en el área y buscando cualquier indicio que pueda ayudar a identificar a los responsables de este acto tan atroz. La comunidad espera que se tomen las medidas adecuadas para garantizar que este tipo de violencia no vuelva a ocurrir y que los criminales sean llevados ante la justicia.
