El director de la universidad comenta sobre la imagen de los estudiantes armados.

Recientemente, ha circulado en diversas plataformas de redes sociales una imagen que ha generado un gran revuelo, particularmente porque muestra a presuntos estudiantes de José María Castro Madriz Liceo armados. Esta imagen ha suscitado preocupaciones tanto en la comunidad educativa como en los padres de familia.

En la fotografía se pueden ver a cuatro jóvenes, de los cuales uno sostiene un arma de alto calibre. Esta inquietante escena ha llevado a las autoridades a actuar con rapidez y determinación, ya que la presencia de estas armas en un entorno escolar es alarmante y potencialmente peligrosa.

Adrián Bolaños, la directora del José María Castro Madriz High School, ha declarado que el personal de orientación de la institución se encuentra realizando un esfuerzo adicional para identificar a las personas involucradas y además, están en contacto con las familias de los estudiantes. Este es un paso crucial para asegurar la transparencia y la seguridad en la comunidad escolar ante esta grave situación.

“La institución ha estado revisando las mochilas y las bebidas de los estudiantes desde el último mes. Por lo tanto, el hallazgo de esta imagen es motivo de gran preocupación. Estamos coordinándonos con un joven fiscal criminal y abordando el proceso de quejas penales respecto al tipo de arma que aparece en la fotografía”, expresó Bolaños.

La directora enfatiza que no hay certeza de que el incidente haya tenido lugar dentro de las instalaciones del centro educativo, lo que ha llevado a la administración a investigar a fondo la situación. Este enfoque proactivo es esencial para mantener la seguridad y la tranquilidad dentro de la comunidad escolar.

“El Ministerio de Educación Pública (MEP) está comprometido con la seguridad en los centros educativos y aboga por la creación de un entorno de paz y convivencia. Por lo tanto, hemos decidido actuar inmediatamente para proteger a toda la comunidad educativa”, añadió.

Bolaños también ha confirmado que la institución se ha puesto en contacto con la vida estudiantil del MEP, así como con la oficina de derechos estudiantiles del controlador, para asegurar que se maneje la situación de la manera más adecuada posible. Este es un esfuerzo colectivo para abordar la seria naturaleza del incidente y para garantizar que la seguridad de los estudiantes y el personal no se vea comprometida.

En resumen, la comunidad del José María Castro Madriz Liceo se encuentra en un estado de alerta, y es fundamental que todos los involucrados trabajen juntos para prevenir cualquier situación similar en el futuro. La educación en un ambiente seguro debe ser la prioridad número uno, y el compromiso de las autoridades educativas es un paso en la dirección correcta.