El presidente de la República, Rodrigo Chaves, llevó a cabo una importante visita al Centro Penitenciario de Los Ángeles esta mañana. En compañía del Ministro de Seguridad, Mario Zamora, y el Ministro de Justicia y Paz, Gerald Campos, Chaves se sumó a la iniciativa de supervisar las instalaciones y las condiciones de reclusión de los prisioneros en un contexto de nuevos lineamientos gubernamentales para los internos de máxima seguridad.
La visita se realizó este viernes, un evento que ha causado revuelo en la opinión pública, dado que forma parte de una serie de nuevas medidas implementadas por el gobierno en su política penitenciaria. Estas acciones buscan abordar la situación de los prisioneros, especialmente aquellos considerados de alta peligrosidad, y reflejan un cambio de enfoque en la gestión del sistema penitenciario del país.
Las imágenes que fueron captadas y compartidas por la presidencia muestran al presidente Chaves, junto a los ministros, recorriendo las instalaciones del centro, donde aprovechan la ocasión para dialogar y estrechar la mano de los oficiales encargados de la seguridad del lugar. Este tipo de visitas no solo permite al gobierno observar de primera mano las condiciones dentro de las cárceles, sino que también puede ser visto como un intento por humanizar el tratamiento de los reclusos, a pesar de las restricciones recientemente impuestas.
Las medidas
El gobierno anunció recientemente un conjunto de nuevas medidas relacionadas con la vida en prisión durante una conferencia de prensa realizada el miércoles. Estas medidas, que limitan algunos derechos de los prisioneros, buscan un control más estricto dentro de los centros penitenciarios, especialmente para aquellos clasificados como de máxima seguridad.
Entre las reglas más destacadas, presentadas por el Ministro de Justicia y Paz, Gerald Campos, se encuentran cambios significativos en la forma en que los reclusos podrán comunicarse con el exterior:
- Recibir paquetes limitados a una vez al mes, restringiendo la entrega a solo artículos esenciales y necesarios.
- Las visitas familiares se reducirán significativamente, pasando de ser semanales a únicamente una visita al mes.
- Las visitas conyugales, que antes eran quincenales, serán limitadas a una cada dos meses.
- Las llamadas telefónicas estarán restringidas a despachar 10 minutos por semana.
