Según Fabricio Alvarado, vicepresidente y ex candidato presidencial del partido evangélico Una nueva república, muchos aspirantes políticos ven atractivo el voto conservador. «La pregunta que surge es si esta inclinación es genuina o simplemente una estrategia electoral», afirmó Alvarado. Durante una reciente entrevista con Observador, subrayó la feroz competencia que se anticipa para el voto conservador en las elecciones nacionales de 2026, especialmente con el actual gobierno intentando capturar a este segmento de la población.
Alvarado enfatizó que a menudo los políticos buscan acercarse a las iglesias y presentar una fachada conservadora en tiempos electorales, tras haber observado que este tipo de votación puede ser decisivo en las urnas. «Siempre he comentado que, durante las campañas, los políticos tienden a volverse más conservadores porque quieren asegurar esos votos fuertes», añadió.
Camino hacia las elecciones de 2026
El escenario electoral comienza a calentarse a medida que se acerca la fecha de las elecciones, programadas para febrero de 2026. Varios partidos políticos ya han designado a sus candidatos, mientras que otros, como Una nueva república, están en busca de ratificación.
Alvarado mencionó que a finales de abril o mayo está contemplando anunciar si se postulará por tercera vez a la presidencia. En las elecciones de 2018 quedó en segundo lugar, mientras que en las de 2022 finalizó en la tercera posición. A su juicio, Costa Rica puede considerarse «en su mayoría» conservadora.
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Un partido 100% conservador
Alvarado sostiene que su partido ha ocupado una clara posición política, no únicamente durante las elecciones, sino también a través de su labor en la asamblea legislativa. «Nos hemos mantenido alineados con nuestros valores conservadores y nadie puede refutar esto», afirmó, destacando que su partido es el único que puede considerarse 100% conservador en el país. Este enfoque será reforzado en sus campañas de comunicación de cara a los próximos meses.
Él reconoce que, en el proceso electoral, habrá una competencia significativa entre candidatos que deberán demostrar sus credenciales conservadoras. Además, resalta que él y su equipo han sido fundamentales en el desarrollo de políticas dentro de los gobiernos de Luis Guillermo Solís y Carlos Alvarado y han estado firmemente alineados con la administración actual en cuestiones como la defensa de los derechos humanos, argumentando en contra de los compromisos en este ámbito.
En cuanto a sus convicciones, se oponen rotundamente al aborto y son críticos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (SDG) para 2030, afirmando que estos no reflejan los valores de la población costarricense.
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Fabricio Alvarado todavía no confirma su candidatura presidencial. (Archivo/la foto del observador)
Reflexiones sobre su decisión final
Alvarado todavía está considerando su postulación a la presidencia. «No hemos tomado una decisión final, estamos enfocados en abordar cuestiones importantes en la legislatura y en conectarnos con las bases, realizando un recorrido por diversas regiones del país», explicó, mencionando su visitas a Guanacaste, Limón y en varias localidades de Alajuela y San José.
En cuanto a los preparativos legislativos, anotó que no piensan dejar para el final el registro de su candidatura, indicando que para fines de abril o principios de mayo podría haber un anuncio sobre su intención de postularse. Este proceso incluye la consulta a líderes locales sobre el panorama electoral y el análisis de las expectativas para la próxima contienda electoral.
Por el momento, no se vislumbra otro candidato que se asome como una alternativa para liderar la postulación, lo que sugiere que su candidatura será tomada con seriedad y respaldo dentro de su partido. «Parece que es una posibilidad real y, como presidente del partido, lo vería como un avance positivo», concluyó, ponderando la posibilidad de que otra figura emergiera como candidato.