Esta mañana, la Oficina del Ministro de Justicia realizó una importante denuncia contra el presidente de la República de Costa Rica, Rodrigo Chaves Robles, así como contra el actual Ministro de Cultura y Juventud, Jorge Rodríguez Vives. La acusación se centra en el delito de conmoción cerebral, un cargo crítico que podría tener repercusiones serias para los involucrados.
Se reveló esta información a través del ministerio público, el cual ha concluido una extensa investigación liderada por el Ministro de Justicia, Carlo Díaz. Esta indagación está relacionada con un caso de reclutamiento que implica más de $400,000 destinados a servicios de comunicación, los cuales se obtuvieron mediante fondos del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
Según los hallazgos reportados por la Oficina del Ministro de Justicia, se investiga el reclutamiento, que ha suscitado interrogantes sobre la posible manipulación del contratista de la compañía RMC LA SA. Este contratista debía proporcionar servicios de comunicación, marketing, asesoramiento estratégico, producción de mensajes y análisis sobre el desarrollo de la opinión pública para la Oficina Presidencial de la República de Costa Rica. La referencia al número de reclutamiento es 20222222, lo que da cuenta de la formalidad del proceso.
En los documentos presentados, también se señala que en el marco de estas acciones, el fabricante de sonido y fotografía, Christian Bulgarelli, fue presuntamente inducido a participar en la entrega de «malentendidos» relacionados con el reclutamiento financiado por BCIE. Esto implicaría conexiones con Federico Cruz, un asesor de campaña del presidente y alguien considerado un amigo cercano a Chaves, quien disfruta de una ganancia cercana a los $32,000, de acuerdo con información del ministerio público. Este caso penal está identificado con el número 25-000044-0033-PE.
La acusación detalla que durante el proceso de reclutamiento, los funcionarios involucrados mantuvieron comunicación continua y llevaron a cabo diversas reuniones en la oficina presidencial de CASA, donde orientaron a Bulgarelli para que elaborara los términos de su contrato, un detalle que podría complicar aún más el panorama legal. A pesar de su implicación, Bulgarelli parece haber encontrado una salida, ya que ahora está cooperando con el ministerio público como testigo, lo que podría influir en su situación legal al prometer colaborar en el caso penal.
Según el ministerio público, se ha abierto otro caso en contra de Bulgarelli, identificado como 25-000043-0033-PE, donde se solicitará una suspensión del proceso penal hasta que el tribunal llegue a una conclusión. Sin embargo, esta suspensión es contingentada, ya que si la cooperación de Bulgarelli no es satisfactoria para el ministerio público, el proceso penal continuará sin él.
¿Qué revela Chaves?
El delito de conmoción cerebral está descrito en el artículo 355 del Código Penal. Esta disposición indica que las sanciones para este tipo de crimen varían de 2 a 8 años de prisión. Esto se aplica a cualquier funcionario público que abuse de su posición al forzar o alentar a alguien a entregar o prometer inapropiadamente bienes o legados para sí mismo o para un tercero.
Para abordar estos graves hechos, la oficina del fiscal busca mantener cierta privacidad y ha entregado la solicitud pertinente a la oficina del diputado para continuar con el procedimiento. Este proceso se encuentra en el Hall III, ya que Chaves es parte de la alta jerarquía del Estado y, por lo tanto, tiene inmunidad. Es relevante mencionar que la oficina del Ministro de Justicia ha sido notificada, actuando en calidad de representante estatal, lo cual plantea la necesidad de determinar si debe considerarse un actor demandante o civil en esta situación.